Atención, mamás y papás, abuelas y abuelos, hijas e hijos,
sanvalentines, cobardones, locos, cuerdos, pulgosos y mascotas que
quieran unirse (¡ADVERTENCIA!, abstenerse mascotas alérgicas a picaduras
de pulgas) ¡CHANTATACHÁNNN! Vamos a convertirnos en las
dueñas y dueños de las cosas pequeñas. Las muy, muy pequeñas. Vamos a
llenarnos de pulgas, pulgas forzudas, equilibristas, saltarinas,
trapecistas, adivinas, ilusionistas y otras hermanas suyas igual de
listas que nos van a hacer jugar y disfrutar como perricos. Vamos
a jugar a imaginar. Vamos a inventar. Vamos a abrir un agujero en la
cabeza. Un agujero por el que no salen ideas, sino que entran. Un
agujero por el que no se escapa el cerebro, sino que atrapa ideas,
palabras y fantasías. Vamos a demostrar que la imaginación más
pequeña (tan pequeña como una pulga) es grande, muy grande. Tan grande
como un dinosaurio. Tan grande como un rascacielos. Tan grande como el
Gran Cañón del Morado, que es mucho mayor que el Gran Cañón del
Colorado, (aquí, otro redoble de tambor). Un pequeño espectáculo en el que la magia y
el títere se dan la mano para ilusionar, divertir y sorprender al
público, os invitamos a disfrutar de la imaginación
de Fernando Saldaña. Más información en http://saldanaespectaculos.blogspot.com.es/
Género: familiar, circo de pulgas.
Público: todos los públicos.
Aportación: 6€.RESERVA DE ENTRADAS